Los enemigos del descanso
Los dispositivos electrónicos. Las cenas copiosas. Un colchón que no sea de KHAMA. Las estridencias. Los colores chillones en las paredes. El primer recibo de la hipoteca. La televisión en la habitación. La ansiedad. El móvil en la cama. El sedentarismo. Acostarse sin hacer las paces. La música chimpún-chimpún.
Una almohada que no sea de KHAMA. La decoración de la habitación con tonos fuertes. Un disco de Metallica. Una playlist de reggaeton. Que a ella le guste la gasolina. Una siesta de tres horas. Arma Letal 1. Darle vueltas a lo de siempre. El estrés. Despertarse tarde y acostarse tarde.
Que la ropa de cama no sea de KHAMA, valga la redundancia. La multitarea. La cafeína. Los pensamientos negativos. La falta de autoestima. Un disco de Iron Maiden. Darle más gasolina. La tablet después de las 22:00 h. Arma Letal 2. La nicotina. No respetar los horarios del sueño. Los refrescos gaseosos. Tomarse un descanso como Rachel y Ross en el capítulo 15 de la tercera temporada de Friends.
Un disco de ACDC. El té. El chocolate. La falta de ejercicio. El ‘ya lo haré mañana’. Procrastinar. ‘Scrollear’ una web que no sea la de KHAMA. Arma Letal 3. El alcohol. Trabajar hasta tarde. La comida picante. Los azúcares. El nerviosismo. El mal humor. Un gol del equipo rival en el minuto 90. Las notificaciones sonoras en el móvil. Los grupos de WhatsApp. La Roomba del vecino de arriba. Las maracas de la vecina de abajo.
Acostarse con el estómago lleno. Arma Letal 4. Un café espresso por la noche. Las altas temperaturas. Los estupefacientes. No leer. Un libro de Paulo Coelho. Un vecindario alegre y con ganas de fiesta. Un disco de Judas Priest. Los finales de mes. La desocupación. Las preocupaciones. El exceso de trabajo. El Ibex 35. Loca Academia de Policía 4