¿Verdad que no todos usamos la misma talla de camiseta?
¿Ni tampoco de pantalón? Pues igual que la ropa se ajusta a nuestro cuerpo, ¡también debe hacerlo nuestro colchón! Una persona que lleve una talla L difícilmente irá cómoda vistiéndose con una XS, lo mismo que una persona que necesite un colchón firme se hundirá si compra uno demasiado suave.
Para eso nos sirve saber tu IMC: para poder recomendarte el confort de colchón que necesitas según tu cuerpo.
Para dormir bien, tu colchón debe tener el confort adecuado a tu peso y altura (IMC).
La fórmula del IMC es tu peso (kg) entre tu altura (m) al cuadrado.
Personaliza el confort de cada lecho.
Sí, sí, como lo lees. KHAMA es sin duda el colchón ideal para dormir en pareja, ¿o debería decir que es el colchón del amor? Con KHAMA, se acabaron las discusiones a la hora de comprar el colchón. Ahora cada uno podrá elegir una firmeza diferente para su lado de la cama.
Por ejemplo, si el IMC de tu pareja es 20 y el tuyo 30, podréis tener un colchón mitad suave mitad firme. No os enteraréis cuando el otro se mueva y dormiréis los dos juntos, pero igual de bien.
Palabrita de KHAMA.
Nos lo dijeron nuestros clientes.
Tras un estudio con más de 1200 personas de distintos IMC, descubrimos que hay una relación directa entre el peso y altura de la persona y la firmeza de colchón que necesita para dormir bien.
Así, establecimos cuatro rangos de IMC asociados a cuatro rangos de confort y probamos las mejores espumas para ello. Nuestras capas de confort suave, medio, firme o extrafirme están elegidas atendiendo a criterios de resistencia y adaptabilidad.
¿Quieres saber cuál es el tuyo?